Hay lágrimas que alejan
a la velocidad de la luz
y otras que me acercan
a dónde estés tú.
Hay lágrimas que chantajean
juguetonas, entre bambalinas
y otras que ponen en neblina
a tu mirada azul.
Hay lágrimas hirientes
como puñales que van y vienen
entre la traición y yo,
sofisticadas y prefabricadas,
teledirigidas,
como una arma
de última generación.
Hay lágrimas que solo recuerdan
a otras lágrimas,
otras que nacen
para ir a morir a mis dedos
y lágrimas mágicas
que aún siendo solo agua
al aparecer encienden tu cara.
Hay lágrimas urgentes
salvadoras y necesarias,
que brotan sin querer, sin llamar
que escapan, casi sin avisar
como el gas de una botella abierta
para dejar al líquido en calma.
Hay lágrimas tan pequeñas
que inundarían tres galaxias
y otras tan grandes
que desaparecen en la nada
y hay lágrimas silenciosas
desapercibidas, invisibles
como mi corazón.
Hay lágrimas malditas, negras,
lacerantes, dolorosas
falsas, eternas, guerreras...
y hay lágrimas contagiosas
aunque tú estés en el fin del mundo
y yo en mi mundo...
Canción seducida por el post:
LOS SECRETOS
Está prohibido llorar
Aún recuerdo cuando verte era como un día festivo
cuando el resto de la gente no existía para mí
cuando el sol nos calentaba aunque fuera el mes más frío
y tu ausencia me bastaba para sentirme perdido
y me encontrabas como un niño que no sabe dónde ir.
Pero el tiempo que maldigo fue cambiando tantas cosas
lo que antes fueron rosas ahora son solo olvidos.
No quiero inventar excusas, tampoco buscar testigos
sólo sé lo que he perdido y quiero recuperar.
Por favor no digas nada, que está prohibido llorar.
Era un martes de diciembre ese día prometido
que quise volver a verte y recordarte lo que fui
al cruzarme en tu mirada sentí el filo de un cuchillo
que mi alma atravesaba y me dejaba malherido
y recordé que tu camino ya no pasaba por aquí.
Esperando la mañana de otra noche que se ha ido
sólo espero que el olvido no me vuelva nunca a mirar
nada más que decirte que sólo soy lo que he sido
un alegre triste herido de otra guerra sin final.
Por favor no digas nada, que está prohibido llorar.
Las canciones y sonidos que antes tú me regalabas
ahora son ruidos prohibidos que ya nunca escucharé
como nadie me acompaña he vendido mi cariño
he tirado mi palabra y alquilado mi destino
lo demás lo regalaba y nadie lo vino a buscar.
Esperando despertarme de otro sueño mal dormido
ahora quiero levantarme y que todo esté en su lugar
y algo más que pedirte que antes no te he pedido
y es que aún estés conmigo cuando vuelva a despertar.
Por favor no digas nada, que está prohibido llorar.