21 de julio de 2009

Tu sonrisa es

Ya sé que mis palabras no te consuelan y que el dolor que sientes (sentimos), es de los que se clavan en el fondo del alma, pero me siento tan impotente, tan minúsculo…

Por ello, he rescatado aquel poema que te dediqué cuando eras tan feliz y tu sonrisa iluminaba hasta el último rincón del corazón de la gente que te rodeaba… y del mío.

Para ti… mi princesa… mi Sara… mi PrinceSara…



Tu Sonrisa Es

Tu sonrisa es
imperecedera como el tiempo,
tan implacable, similar a un latido,
a veces silenciosa, secreto escondido,
otras tan poderosa como cien mil guerreros.

Tu sonrisa es
importante, similar a un legado,
útil para romper todas las cadenas,
reconfortante, parecida a mil abrazos,
luminosa como la luna llena.

Tu sonrisa es
cálida, igual que la lluvia en agosto,
a veces tan transparente, palabras de niño,
otras en neblina, esperando al enemigo,
tan necesaria que impide que esté sumergido en el lodo.

Tu sonrisa es tan libre
que anoche pedí a un viejo sabio,
que me indicara una caja donde guardarla,
y éste, con la experiencia de los años,
me indicó dos cajas sublimes:
mi corazón y mi alma.

Tu sonrisa
eres tú.


Canción seducida por el post:



LA SONRISA DE JULIA

SONRISAS DE PAPEL

Condenándote al olvido no conseguiré cambiar
todo ese tiempo perdido que no te pude regalar.
Condenándote al olvido nunca volveré a creer
en la suerte de un destino que siempre quise comprender.
Disfrazando mis palabras con sonrisas de papel
no conseguiré ocultarles las heridas de mi piel.

Si te marchas con la brisa a descansar en tu mar
se que llegará algún día que nos podremos bañar
rodeados de tus risas y embriagados con la sal
que tú has puesto en nuestras vidas… algún día volverán
Disfrazando mis palabras con sonrisas de papel
no conseguiré ocultarles las heridas de mi piel.

Pero no existen heridas
que me impidan sonreír
cuando entiendo que algún día
nos volveremos a unir.

Recorriendo este camino junto a ti se me ha hecho corto
si algún día no estás conmigo seguiré el camino solo.
Pues tú has llenado mis bolsillos con sonrisas y entusiasmo
y he metido en mi mochila el calor de tus abrazos.
Y disfrazando mis palabras con sonrisas de papel
no conseguiré ocultarles las heridas de mi piel.

Pero no existen heridas
que me impidan sonreír
cuando entiendo que algún día
nos volveremos a unir.